FEDERICO MARTIN BAHAMONTES. Más conocido como el águila de Toledo. 50 duros tienen la culpa de que este ciclista se convirtiera en el mejor escalador de todos los tiempos, esos 50 duros fueron los que le costaron a su padre una bicicleta. De reseñar seria su primera participación como profesional en la vuelta a Asturias, se desplazo 700kms en bici desde Toledo a Asturias para participar en la carrera. Sonada es también su subida a la cima de Romeyére donde se paro a comer un helado mientras esperaba a los demás porque le daba miedo bajar solo. El Águila era un loco, Galdeano uno de sus gregarios en aquellos tiempos lo sabia: “Bahamontes es un tío que como se escape alguien al que le tiene manía, le salta, se va por los llanos a por él. Gana la montaña y se crece. Y luego pierde media hora en el llano, y echa la culpa a los domésticos, a los del equipo”. Pero este genio fue el primer español en ganar un Tour.
FAUSTO COPPI. Este repartidor de comestibles, italiano, ha sido uno de los mas grandes logrando 5 giros, 2 Tours y 3 veces el maillot de la montaña. Este señor estuvo prisionero por los ingleses… ¡Gibraltar español!... durante la II guerra mundial en África. Durante su carrera realizo multitud de exhibiciones en los puertos y realizando increíbles remontadas principalmente en sus participaciones en el Giro. Pero mas sonada fue su enemistad con su gran rival Gino Bartali (otro grandísimo escalador) que se rumoreaba que se debía a algún lío con sus mujeres. Coppi falleció joven (40 años) como todas las raras avis.
Pero si hablamos de escaladores no podemos olvidar a CHARLY GAUL o “el ángel de las montañas”, coetáneo de Bahamontes, curioso caso el suyo. Mítica es su victoria un 9 de septiembre en el Monte Bondone durante el Giro’56, 242kms bajo la nieve y con una ventisca increíble, llego a meta casi congelado cuando casi todo el pelotón se había retirado con temperaturas de hasta -10ºC. Charly tras cruzar la línea se desmayo por agotamiento. Logro 2 giros y un Tour, y tras su carrera como profesional se marcho a las montañas a vivir en una cabaña como ermitaño donde monto un pequeño santuario del ciclismo luciendo una gruesa barba blanca.
Etapón el de hoy con final en Cotobello.
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